Cirugía bariátrica: riesgos, errores médicos y reclamaciones


La cirugía bariátrica, un conjunto de procedimientos destinados a tratar la obesidad severa, se ha convertido en una opción cada vez más popular para quienes no han logrado resultados efectivos con dietas, ejercicio o tratamientos farmacológicos. Sin embargo, aunque este tipo de intervención puede transformar vidas, no está exento de riesgos. Más allá de las complicaciones inherentes a cualquier procedimiento quirúrgico, los errores médicos en cirugía bariátrica pueden derivar en graves consecuencias para los pacientes, desde complicaciones postoperatorias hasta secuelas permanentes.

 

Riesgos inherentes a la cirugía bariátrica

Antes de hablar de errores médicos, es importante diferenciar los riesgos naturales de la cirugía bariátrica de las posibles negligencias. Todo procedimiento quirúrgico conlleva riesgos que, aunque controlados, no pueden eliminarse por completo. Las complicaciones más comunes en la cirugía bariátrica incluyen infecciones, sangrados, fugas gastrointestinales o problemas con la cicatrización. Además, puede haber complicaciones a largo plazo como el síndrome de dumping (una evacuación rápida de los alimentos desde el estómago al intestino delgado), deficiencias nutricionales o la necesidad de reintervenciones.

Estos riesgos son parte del tratamiento y, en la mayoría de los casos, están previstos y gestionados adecuadamente por los equipos médicos. Sin embargo, la línea entre una complicación esperada y un error médico puede ser delgada. Cuando un profesional sanitario no sigue los protocolos establecidos o comete un error durante el procedimiento o en el seguimiento, es posible que estemos ante un caso de negligencia médica.

 

Errores médicos más comunes en cirugía bariátrica

Aunque los errores médicos en cirugía bariátrica no son extremadamente comunes, sus consecuencias pueden ser devastadoras. Estos errores pueden ocurrir en distintas fases: antes, durante o después de la cirugía, y cada uno de ellos tiene sus propias particularidades.

  • Uno de los errores más graves que puede ocurrir antes de la cirugía es una mala valoración del paciente. No todos los pacientes con obesidad son candidatos ideales para una cirugía bariátrica, y es esencial realizar una evaluación exhaustiva para determinar si el procedimiento es adecuado para ellos. En algunos casos, la cirugía puede no ser recomendada por razones médicas subyacentes, como problemas cardíacos, respiratorios o trastornos psicológicos que puedan complicar el postoperatorio. Un error en esta fase puede llevar a intervenciones innecesarias, o peor, a la muerte del paciente durante o después de la cirugía.
  • Durante el procedimiento quirúrgico en sí, uno de los errores más comunes es el daño a los órganos cercanos, especialmente en cirugías mínimamente invasivas (laparoscópicas), donde el campo de visión del cirujano está limitado. Esto puede ocurrir cuando no se siguen las pautas de seguridad quirúrgica o cuando el equipo quirúrgico no está debidamente capacitado. Las lesiones en el estómago, los intestinos o los vasos sanguíneos pueden dar lugar a complicaciones graves, como peritonitis o hemorragias internas, que pueden poner en riesgo la vida del paciente.
  • En el postoperatorio, los errores relacionados con un seguimiento inadecuado son otra causa frecuente de complicaciones. Después de una cirugía bariátrica, el paciente debe recibir un seguimiento estricto para controlar su recuperación y prevenir problemas relacionados con la malabsorción de nutrientes, el reajuste del sistema digestivo y la cicatrización de las heridas internas. En muchos casos, la negligencia en esta fase implica no detectar a tiempo una fuga gastrointestinal o una infección, lo que puede derivar en la necesidad de una reintervención o en secuelas permanentes.

 

¿Cuándo se considera que ha habido una negligencia médica?

Para que un error médico en cirugía bariátrica sea considerado una negligencia, debe demostrarse que no se actuó conforme a los estándares médicos establecidos y que esa desviación de los protocolos ha causado un daño directo al paciente. Esto puede implicar desde una intervención inadecuada hasta la falta de seguimiento correcto después de la operación.

En casos de cirugía bariátrica, algunas de las situaciones que podrían considerarse negligencia incluyen:

  • Falta de información adecuada antes del procedimiento. El consentimiento informado es fundamental, y el paciente debe estar completamente al tanto de los riesgos inherentes y las posibles complicaciones. Si no se ofrece esta información y el paciente experimenta una complicación que no conocía, podría haber base para una reclamación.
  • Errores técnicos durante la cirugía, como cortar el lugar equivocado, no cerrar correctamente una incisión o perforar accidentalmente un órgano.
  • Infecciones derivadas de una higiene inadecuada en la sala de operaciones o en el cuidado postoperatorio, que podrían haberse prevenido si se hubieran seguido los protocolos adecuados.
  • No detectar o tratar complicaciones postoperatorias a tiempo, como una fuga en el estómago o una oclusión intestinal, que requieren atención médica urgente.

Es importante señalar que no todas las complicaciones derivadas de una cirugía son necesariamente negligencias. Existen situaciones en las que, a pesar de la correcta actuación del equipo médico, el paciente puede sufrir complicaciones debido a su condición preexistente o a la complejidad del procedimiento. Por eso, en casos de reclamación, resulta esencial contar con peritajes médicos que evalúen si los estándares médicos fueron respetados.

 

Reclamaciones por errores médicos en cirugía bariátrica

Para reclamar por una negligencia médica relacionada con una quirugía bariátrica, es fundamental recopilar toda la documentación médica relacionada con el caso, incluyendo el consentimiento informado, los informes preoperatorios, intraoperatorios y postoperatorios, así como los resultados de las pruebas y los diagnósticos realizados. Además, es crucial contar con el testimonio de expertos médicos que puedan evaluar si se ha actuado conforme a la lex artis, es decir, si el tratamiento ha seguido las pautas médicas que se considerarían adecuadas en esa situación.

El proceso de reclamación puede iniciarse por vía administrativa, civil o penal, dependiendo de la gravedad del daño y las circunstancias específicas del caso (más información). El objetivo de la reclamación es obtener una compensación económica que cubra los daños sufridos por el paciente, y que pueden incluir tanto el perjuicio físico como los gastos derivados de tratamientos adicionales, o incluso la pérdida de ingresos.

 

Resumiendo, la cirugía bariátrica puede ser una solución efectiva para la obesidad severa, pero también conlleva riesgos que, si no se gestionan adecuadamente, pueden convertirse en negligencias médicas. Un error durante el procedimiento, una mala evaluación previa o una falta de seguimiento postoperatorio adecuado pueden tener consecuencias graves para el paciente. Por ello, es fundamental que los profesionales médicos sigan los protocolos establecidos y que los pacientes conozcan sus derechos y las posibles vías de reclamación en caso de que algo no salga según lo esperado.

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