En los más de quince años de andadura de nuestro despacho, hemos podido comprobar como un porcentaje muy importante de los procedimientos que se emprenden para reclamar por una negligencia médica son iniciados por mujeres, aproximadamente puede situarse en el 80% de los casos. Si bien ello no implica que siempre sean mujeres las víctimas de las negligencias medicas reclamadas.
En este articulo expondremos cuales son las negligencias médicas que con mayor frecuencia se producen en pacientes de sexo femenino.
Embarazo y parto
Obviamente, las negligencias medicas en el parto presentan una incidencia muy importante, porque solo pueden afectar a mujeres y también porque el parto, al ser un proceso natural, no permite en muchos casos la realización de una actuación programada para que sea abordado en las mejores condiciones humanas y técnicas.
Retraso diagnóstico de un cáncer (en especial el cáncer de mama)
Aunque el cáncer de mama es una patología que puede afectar tanto a hombres como a mujeres, la incidencia es mucho mayor en el sexo femenino. Ello se traduce en que en la mayoría de casos, los retrasos diagnósticos se produzcan en mujeres. Es por desgracia un tipo de negligencia que se produce en un importante número de supuestos, aun a pesar de los protocolos sobre cribado de cáncer de mama, elaborado por las principales sociedades científicas de nuestro país.
Neuropatías del pudendo
También esta patología se produce mayoritariamente en mujeres; en el parto, con ocasión de cirugías sobre el aparato reproductor, o también por el defectuoso tratamiento de infeccionen como el quiste de Bartolino.
Ictus
Según refiere el Consejo general de enfermería
El ictus cerebral constituye la segunda causa de mortalidad en nuestro país (primera en la mujer) y es el principal responsable de invalidez en el adulto.
Como consecuencia directa de ello, las negligencias médicas relacionadas con el retraso en el diagnósticos y tratamiento del ictus, suelen ser más habituales en las mujeres que en los hombres.
Incontinencia esfínter anal
Suele ser uno los casos relacionados con el parto, que habitualmente tienen lugar como consecuencia de una incorrecta revisión en el postparto del esfínter anal para comprobar la existencia o no de algún desagarro interno. Suele producirse incontinencia cuando se realizan esfinterotomías en mujeres que han dado a luz en el pasado.